Cali se prepara para el IV Festival Mundial de Salsa

Cali se prepara para el IV Festival Mundial de Salsa

La Capital del Valle será testigo del esfuerzo de 5 mil concursantes, que llegarán de diferentes países, para disputarse el premio a mejor bailarín de salsa.

Al compás de los timbales, el guiro, la trompeta y las maracas Cali le recordará al mundo entero, que los ritmos cubanos y caribeños, también son patrimonio colombiano. Desde hace cuatro años, la Secretaría de Cultura de Cali realiza el Festival Mundial de Salsa, que este año trabajará bajo la temática ‘Joe Cuba y su música para el mundo’, y el cantante referencial será Cheo Feliciano.

En el concurso participarán bailarines de Estados Unidos, Ecuador, Venezuela, Perú, Canadá, España, Japón e Inglaterra; y en representación de Colombia concursarán jóvenes y adultos de Antioquia, Tolima, Cartagena, Bogotá y Cauca. Las categorías con las que nacionales y extranjeros concursarán son: Infantil, desde los 4 a los 13 años de edad y Adultos, desde los 14 años en adelante, quienes deberán dividirse en dos subcategorías: Bailando ON 1, para las caídas y pasos libres en la salsa y Cabaret, para los trucos, alzadas y pasos asistidos.

Este año el IV Festival Mundial de Salsa, no sólo reúne a los mejores bailarines del mundo, sino que involucra a investigadores, académicos, empresarios, directores artísticos y diseñadores; y por primera vez, la Monumental Plaza de Toros Cañaveralejo, será el escenario que reunirá a más de 15 mil espectadores durante el certámen.

“Más que una competencia, este evento es un proceso cultural, pues se dictarán charlas pedagógicas, talleres y muestras empresariales, que estarán a cargo de músicos reconocidos y de gran trayectoria en el mundo de la salsa”, señaló el coordinador del Festival, Luis Alberto Sevillano.

La sede de la mezcla más grande de ritmos cubanos será la Capital del Valle, desde el próximo 14 de septiembre, a partir de las 4:00 p.m., un evento de acceso gratuito para caleños y visitantes, con un cierre de gala a cargo del maestro Cheo Feliciano.

Vía
El Espectador