Minuto para ganar kids ¿Todo lo que involucre niños significa éxito?

Hace varios años, los canales privados apostaron por adaptar diversos concursos a la modalidad infantil, con todos los pros y los contras que ello genera. Desde Factor Xs hasta Minuto para ganar Kids, pasando por La Voz Kids y próximamente Masterchef Junior, tal parece que lo que lleve el rótulo de “Kids” podría significar éxito. Sin embargo, recordemos que el tercer Factor Xs pasó con más pena que gloria en el 2011, y que otros como Juego de Niños (en RCN) o ¿Sabes más que un niño de primaria? (en Caracol) han caído en el mayor de los anonimatos.

La franquicia ‘Un minuto…’ ha sido el único formato que ha pasado por tres manos distintas (primero en Caracol, luego recientemente en CityTV, y ahora en su versión infantil, llega a las toldas de Las Américas).
Pero la situación para los del canal de las tres letras dista mucho de ser halagüeña, aun con este formato: Caracol ha sacado la artillería pesada con su intragable Desafío India, que ha logrado liderar, así sea apelando a peleas de gatas (más dignas de PDNT) y pruebas tan trilladas que la gente, antes de que empiecen, ya casi se las sabe de memoria cómo resolverlas. Y es que Separados fue el peor error de programación del 2015 para RCN: espantó buena parte de la audiencia que con mucho esfuerzo logró ganar Masterchef Colombia, y le dio un inmerecido segundo aire a la franja de las 8 en Caracol. A RCN le pasó lo de la liebre de aquella famosa fábula, y ahora ven cómo les sobrepasa la tortuga. O más bien, el molusco.

Pero no todo parece malo en este formato, a pesar: al menos los primeros participantes tenían carisma. Las pruebas son las que son, en eso no van a competir con las de sus rivales de patio. En lo personal, a mí me aburren solemnemente todos los concursos con niños. Desde ya me preocupo que adaptemos Tu cara me suena mini (que emitió Antena 3 hace poco). Demasiada ñoñez televisiva cansa.

He de decir que aquí sentí menos libreteado a Sebastián Martínez que cuando fue presentador en el malogrado Mundos Opuestos (2012). A falta de un proyecto actoral exitoso a la vista, bueno es presentar cualquier game show. Que lo diga su colega Julián Román. Eso sí, su apariencia fresca no compensa sus carencias como presentador. Un consejo: No lo pongan a pronunciar tan seguido “Walt Disney´s World”: Parece egresado de la Yeris Paola´s English School. Bueno, mejor Sebastián que Silvestre Dangond, no vaya y se le dé por darle otros “aguinaldos” a los niños participantes #YouKnowWhatIMean.