Cuando vivas conmigo, el nuevo “inflado con humo” de CaracolTV
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Cuando vivas conmigo, el nuevo “inflado con humo” de CaracolTV

Pink Sauce nos entrega con su estilo la crítica a la nueva producción del canal Caracol 'Cuando vivas conmigo', recientemente estrenada.

El horario de las 9 de la noche en Caracol tiene un nuevo huésped. Y es de agradecerse que esta vez no sea la enésima bionovela, corronchonovela o traquetonovela que a nuestros cada vez menos creativos de TV se les haya ocurrido. Aunque de un largo tiempo para acá, este horario se ha llenado de producciones terriblemente sobrevaloradas como Niche, La esclava blanca o La Niña (con sus finales cursis), los de la Floresta apuestan por adaptar El héroe discreto de Mario Vargas Llosa –su primera novela tras ganar el premio Nobel de literatura en 2010- para hacer Cuando vivas conmigo. Se traslada la acción de tierras peruanas a ese espacio sin nombres definidos pero que todos asumimos que es en este país.

La novela arranca con la infancia de dos hermanas, Gertrudis y Armida, ambas separadas por la tragedia, criadas por una tía desalmada (Luz Stella Luengas, en un papel bastante mejorable) que, sin empacho, hasta pensó en prostituirlas, como factor detonante de la trama, ya que una de las chicas se da cuenta de los siniestros planes, mientras otra se entregaba al primer amor. Ambas piensan huir, pero el amor traicionero de una de ellas las delata. Mientras Gertrudis es rescatada por Felix (Interpretado por Christian Tappan, otro de los sempiternos de Caracol), quien a la postre se convertiría en su marido, la otra va rumbo a la gran ciudad huyendo de aquel voraz incendio, empleándose en lo que salga. Y así, sin solución de continuidad, ambas crecen: Gertrudis (Sandra Reyes) se vuelve un ama de casa hacendosa y con dos hijos, pero que busca desesperadamente a su hermana Armida (Catherine Escobar), quien es una empleada del servicio, quien quiere abrir una academia de champetón, pero que es rechazada por su novio en frente de todos –no precisamente aquí la historia se vuelve la más coherente-.

Los papeles de los hijos del rico se dan la pelea por ver cual sobreactúa peor: Ignacio (Juan Manuel Lenis) y Magdalena (Norma Nivia) tienen actuaciones dignas de las peores pruebas de talento del cierto reality de la competencia. Diego Trujillo parece haciendo el mismo personaje de siempre, como el que hemos visto de él desde Todos quieren con Marilyn o Los Reyes. La escena de su infarto fue digna de izada de bandera de colegio. Y desde ahí vino una sarta de escenas inconexas como la del esposo de Gertrudis descubriendo la traición de uno de sus colaboradores, la carta extorsiva, los hijos buitres del rico en la clínica y la fiesta de cumpleaños del hijo de Gertrudis. La musicalización de la novela llega a fastidiar aun mas, sobre todo por esa música de tan discutible gusto.

En definitiva, si lo de usted son las historias inconexas que por malabares del destino (en 60 o más capítulos) recompondrán al vaivén del rating, esta es su telenovela. Aunque debutó con unos nada despreciables 11,5 puntos de rating, yo no quedé en lo más mínimo enganchado al nuevo producto por el que el comité de aplausos de Caracol saldrá a sacar pecho. Y no me engancha porque prefiera al ladrillo de los médicos del canal de las tres letras, ese ya no tiene arreglo: No me atrae ya ver TV nacional.